THE WASHINGTON FOREIGN PRESS CENTER, WASHINGTON, D.C. (Via Teleconference) 

(Original English transcripts available here; Transcripciones originales en inglés disponibles aquí)

EL CENTRO DE PRENSA EXTRANJERA DE WASHINGTON, WASHINGTON, D.C. 

MODERADOR: Buenas tardes y bienvenidos a la teleconferencia oficial del Centro de Prensa Extranjera de Washington. El programa de hoy dará una actualización de las labores de ayuda del gobierno de los Estados Unidos en respuesta a la devastación sufrida por la región centroamericana y Colombia por los huracanes consecutivos Eta e Iota. Con millones de personas afectadas, el gobierno de los Estados Unidos ha comprometido fondos de ayuda y asistencia para ayudar a los necesitados en esta región. Los oradores darán una actualización de las labores en curso para trabajar con colaboradores humanitarios y funcionarios del gobierno local para identificar las necesidades humanitarias y entregar ayuda inmediata.  

Primero escucharemos al subsecretario adjunto Hugo Rodríguez y luego al líder del Equipo de Asistencia para Respuesta ante Desastres, Tim Callaghan. Después de sus comentarios, pasaremos a las preguntas y respuestas. Tengan en cuenta que la transcripción se publicará en nuestro sitio web, fpc.state.gov, y los comentarios de los informadores también estarán disponibles traducidos al español. 

Y con eso, comenzaremos con las declaraciones del subsecretario adjunto Rodríguez.

SR. RODRÍGUEZ:Gracias, Jean, y gracias a todos por unirse hoy a nosotros.Como mencionó Jean, me llamo Hugo Rodríguez y soy el subsecretario adjunto en la Oficina de Asuntos del Hemisferio Occidental del Departamento de Estado que cubre temas de migración de Centroamérica, México y la región. Estoy aquí hoy para hablar sobre las extraordinarias labores del gobierno de los Estados Unidos para ayudar a la gente de Centroamérica y Colombia mientras se recuperan de dos graves calamidades, los huracanes Eta e Iota.  

Sé que la gente en toda la región está sufriendo profundamente, muchos han perdido sus hogares, sus medios de vida y, en algunos casos, incluso a sus seres queridos. Para aquellos de ustedes que participan hoy y que se han visto afectados personalmente por los huracanes, sepan que nuestros pensamientos están con ustedes y seguimos trabajando arduamente en las labores de respuesta y recuperación. 

Si bien, afortunadamente, el número de muertos por estas tormentas fue bajo, el impacto que tendrán las tormentas en estos países es abrumador. Según nuestras estimaciones, más de 7 millones de personas se han visto afectadas por las tormentas. En Honduras, casi la mitad de la población se ha visto afectada de alguna manera, con muchas casas devoradas enteras por deslizamientos de tierra y el 70 por ciento de los cultivos destruidos. Más de 400.000 guatemaltecos y hondureños permanecen en albergues.  

Incluso antes de que las tormentas tocaran tierra, los equipos de nuestras embajadas en Centroamérica y Colombia comenzaron a coordinarse con los gobiernos anfitriones y los socios interinstitucionales para preparar una respuesta. El 5 de noviembre, cuando el huracán Eta todavía asolaba el istmo, helicópteros militares estadounidenses comenzaron a rescatar a personas varadas por la tormenta y entregar ayuda a comunidades aisladas. En respuesta a las solicitudes de los gobiernos de Guatemala y Honduras, USAID desplegó un Equipo de Respuesta Rápida dirigido por mi colega, Tim Callaghan, de USAID.  

Y me gustaría pasarle la palabra a Tim ahora para hablar con más profundidad sobre cualquier parte de la respuesta del gobierno de los Estados Unidos. Tim, le paso la palabra.

SR. CALLAGHAN:Muchas gracias, subsecretario adjunto Rodríguez, y buenas tardes a todos.Me llamo Tim Callaghan y soy el líder del Equipo de Asistencia para Respuesta ante Desastres de USAID, o DART. Mientras hablamos este equipo está en el terreno en Centroamérica y Colombia y actúa como la agencia federal líder del gobierno de los EE.UU. para la respuesta a los huracanes Eta e Iota. 

Como muchos de ustedes probablemente saben, estas poderosas tormentas se desataron consecutivamente en el lapso de solo dos semanas. También recorrieron un camino casi idéntico, ocasionando fuertes lluvias, inundaciones y deslizamientos de tierra a muchas de las mismas áreas. Millones de personas se vieron afectadas y muchas personas permanecen en refugios de evacuación. Estos huracanes fueron causantes de lluvia, además de que se produjeron al final de la temporada de huracanes, lo que significa que el suelo ya estaba muy saturado y no podía absorber el agua de lluvia. Los ríos se desbordaron y vimos deslizamientos de tierra en muchos lugares.  

USAID estaba en el terreno y respondió de inmediato al huracán Eta. Luego, el 17 de noviembre, USAID… desplegamos el equipo que actualmente lidero, el Equipo de Asistencia para Respuesta ante Desastres. En su apogeo, el equipo estaba compuesto por 40 expertos de siete países. USAID también asignó US$ 48 millones en asistencia humanitaria para ayudar a personas en Honduras, Guatemala, Nicaragua y Colombia.  

Nuestra respuesta inmediata se ha centrado principalmente en brindar ayuda a las personas que se encuentran en las tiendas de evacuación. Muchas de estas familias lo perdieron todo y necesitan socorro de inmediato. USAID está brindando asistencia alimentaria de emergencia, kits de higiene, agua potable, materiales de refugio, atención médica urgente, protección para los más vulnerables y artículos básicos para el hogar como mantas y juegos de cocina.  

USAID también está trabajando con nuestros socios con el fin de sentar las bases para que las personas regresen a sus hogares y comiencen las labores de recuperación temprana. Como parte de esas labores, estamos proporcionando láminas de plástico de alta resistencia que se utilizarán para reparar los hogares de las personas. Hemos estado trabajando con las comunidades para impulsar la capacidad de las personas para ganarse la vida. Proporcionaremos semillas y herramientas a los agricultores y apoyaremos otros programas para que la gente se recupere.  

En las fases iniciales de esta respuesta, muchas comunidades quedaron sin asistencia. Para llegar a estas personas, USAID solicitó las capacidades únicas del ejército estadounidense para ayudar en nuestras labores de respuesta. En el transcurso de 28 días, la Fuerza de Tarea Conjunta-Bravo de SOUTHCOM entregó más de 257 toneladas métricas de suministros de socorro y en apoyo de las labores de respuesta lideradas por civiles. Además, el buque del ejército de EE.UU. Chickahominy transportó maquinaria pesada desde la parte continental de Colombia a las islas de Providencia y San Andrés afectadas por los huracanes para ayudar a limpiar los escombros en las labores de socorro.  

Durante la última semana, muchas de las aguas de inundación han retrocedido y solo las áreas bajas siguen afectadas. Se han limpiado los escombros de las carreteras principales. Con estas condiciones mejoradas, las fuerzas armadas estadounidenses completaron su misión la semana pasada y esas labores se han trasladado a las empresas de transporte comercial, las autoridades locales y la comunidad humanitaria. Todos estamos viendo que los esfuerzos de limpieza están en marcha y las tiendas y los mercados están reabriendo en las comunidades afectadas. 

Esta respuesta es uno de los muchos ejemplos del trabajo de USAID para salvar vidas y aliviar el sufrimiento en todo el mundo. Como el donante humanitario más grande del mundo, Estados Unidos proporcionó más de US$ 10,5 mil millones en ayuda humanitaria el año pasado. Casi dos tercios de este financiamiento, más de US$ 70 mil millones, provino de USAID mientras respondíamos a docenas de desastres, ayudando a decenas de millones de personas. Ayudar a las personas necesitadas es lo que hacemos como estadounidenses, y saber que las labores realmente están marcando una diferencia es la razón por la que estoy tan orgulloso de liderar esta respuesta al desastre. 

Muchas gracias y le devuelvo la palabra, DAS Rodríguez.

SR. RODRÍGUEZ:Gracias, Tim.Como mencionó Tim, el equipo de la Fuerza de Tarea Conjunta-Bravo con base en Honduras desempeñó un rol crítico y me gustaría mencionar brevemente algunas de esas labores. En cooperación con los gobiernos locales, JTF-Bravo realizó vuelos de rescate y entrega de ayuda en Honduras, Guatemala y Panamá, así como entrega de ayuda en el norte de Colombia. Estas labores involucraron casi 300 misiones y en total rescataron a más de 850 personas, muchas atrapadas por las inundaciones generalizadas. Estoy seguro de que ha visto algunas de las dramáticas imágenes. Su trabajo salvó muchas vidas y, como mencionó Tim, entregaron más de 1,2 millones de libras de alimentos, agua y otros suministros de socorro críticos que se necesitaban desesperadamente a las áreas de difícil acceso que más los necesitaban. 

Además de nuestra coordinación interinstitucional en las labores de ayuda, queremos reconocer la asistencia y la ayuda que tanto se necesita que están proporcionando socios internacionales de confianza como Taiwán. En Guatemala, Taiwán está trabajando con socios en la construcción de un sistema de alerta temprana de ayuda por desastre. En Honduras, Taiwán se ha asociado con una ONG taiwanesa con sede en Los Ángeles para donar más de 1.000 cajas de suministros humanitarios. Y en Nicaragua, Taiwán ha donado casi 800 toneladas de arroz a las comunidades locales afectadas. 

Así como Estados Unidos estuvo con nuestros vecinos durante la tormenta y el rescate, nosotros estamos con ellos en la fase de recuperación que apenas ha comenzado. Y mientras nuestros socios en la región trabajan para reconstruir sus comunidades y sus economías, Estados Unidos continuará nuestro trabajo con estos gobiernos, organizaciones internacionales, el sector privado y otros socios para construir un futuro más resiliente y esperanzador. 

Gracias. Con esto, Jean, te devuelvo la palabra para las preguntas.   

Esta traducción se proporciona como una cortesía y únicamente debe considerarse fidedigna la fuente original en inglés. 

U.S. Department of State

The Lessons of 1989: Freedom and Our Future